Receta fácil. Ideal para los muy croqueteros que nunca se hayan atrevido a hacerlas. Yo os garantizo que si hacéis la receta al pie de la letra, os saldrán perfectas. La desventaja es que cuando probéis éstas, dejarán de gustaros inmediatamente las croquetas congeladas del supermercado :)
LA RECETA:
Ingredientes:
(Para 30 croquetas)
250 gr. de gambitas rojas pequeñas (= 30 unidades aprox.)
1 cebolla
2 dientes de ajos
½ litro de leche entera (o la medida de 2 vasos de los de agua)
3 cucharadas soperas de aceite de oliva
1 taquito de buena mantequilla o el equivalente a 2 cucharadas soperas aprox.
4 cucharadas colmadas de harina
1 cucharada sopera de perejil trinchado (fresco o seco)
2 huevos duros
1 pastilla de caldo concentrado de pescado, tipo knorr , o bien un pellizco de sal.
1 pizca de nuez moscada (opcional)
1 pizca de pimienta molida
Para el rebozado:
Pan rallado
LA RECETA:
Ingredientes:
(Para 30 croquetas)
250 gr. de gambitas rojas pequeñas (= 30 unidades aprox.)
1 cebolla
2 dientes de ajos
½ litro de leche entera (o la medida de 2 vasos de los de agua)
3 cucharadas soperas de aceite de oliva
1 taquito de buena mantequilla o el equivalente a 2 cucharadas soperas aprox.
4 cucharadas colmadas de harina
1 cucharada sopera de perejil trinchado (fresco o seco)
2 huevos duros
1 pastilla de caldo concentrado de pescado, tipo knorr , o bien un pellizco de sal.
1 pizca de nuez moscada (opcional)
1 pizca de pimienta molida
Para el rebozado:
Pan rallado
Huevo
Sal
Elaboración:
1.- Primeramente hervimos los dos huevos. Los ponemos en un cazo con agua que los cubra en frío y cuando arranque a hervir contaremos 10 minutos a fuego medio-alto. Enfriamos rápidamente para que la yema no se oscurezca. Troceamos muy pequeño y reservamos.
2.- Le quitamos las cáscaras y las cabezas a las gambas. Reservamos los cuerpos y ponemos las pieles y las cabezas en un cazo al que le añadiremos dos vasos de leche y la sal o pastilla de caldo (también podéis ponerle un vaso de leche y otro de caldo de pescado o fumet; lo que queráis). Lo ponemos al fuego pero vigilando que no hierva a borbotones por dos motivos, porque la leche rebosará a fuego alto y porque no nos interesa que se nos evapore demasiado ya que para ‘clavar’ las croquetas necesitaremos exactamente dos vasos de líquido. Dejamos hervir unos cinco o seis minutos y dejamos reposar.
3.- Troceamos la cebolla en ‘brunoise’ es decir a dados muy pequeños y la ponemos a rehogar junto con el aceite y la mantequilla a fuego medio-bajo durante 20 minutos, nos ha de quedar casi transparente, no tostada. A media cocción, cuando lleve unos diez minutos más o menos, le añadimos el ajo troceado muy pequeño.
4.- A continuación le añadimos la harina a lo anterior y la rehogamos durante un par de minutos. Enseguida le añadimos la leche que tendremos reservada y previamente colada, y vamos removiendo, mientras controlamos bien el fuego; sobre todo que no se nos queme.
5.- Añadimos la nuez moscada, la pimienta y el perejil. Enseguida empezará a espesar. Lo mantenemos 10 minutos aproximadamente. Apartamos y le añadimos los huevos duros troceados. Mezclamos bien y lo ponemos un plato o superficie lo más plano posible para que se nos enfríe antes. Lo dejamos hasta que se enfríe por completo.
6.- Para el rebozado cogeremos una porción pequeña de masa, mas una gambita entera (la ponemos cruda ya que al ser pequeñas se hacen dentro de la croqueta al freírlas) y nuevamente añadimos otra pequeña porción de masa como si fuera un bocadillo, de manera que la gamba se quede en medio. Se le da forma de croqueta y las pasamos por pan rallado primero, luego por huevo batido y nuevamente por pan rallado; en ese orden, de ésa manera las croquetas cogen consistencia y están más crujientes.
7.- Por último se fríen en una sartén con aceite hasta que estén doradas.
Sal
Elaboración:
1.- Primeramente hervimos los dos huevos. Los ponemos en un cazo con agua que los cubra en frío y cuando arranque a hervir contaremos 10 minutos a fuego medio-alto. Enfriamos rápidamente para que la yema no se oscurezca. Troceamos muy pequeño y reservamos.
2.- Le quitamos las cáscaras y las cabezas a las gambas. Reservamos los cuerpos y ponemos las pieles y las cabezas en un cazo al que le añadiremos dos vasos de leche y la sal o pastilla de caldo (también podéis ponerle un vaso de leche y otro de caldo de pescado o fumet; lo que queráis). Lo ponemos al fuego pero vigilando que no hierva a borbotones por dos motivos, porque la leche rebosará a fuego alto y porque no nos interesa que se nos evapore demasiado ya que para ‘clavar’ las croquetas necesitaremos exactamente dos vasos de líquido. Dejamos hervir unos cinco o seis minutos y dejamos reposar.
3.- Troceamos la cebolla en ‘brunoise’ es decir a dados muy pequeños y la ponemos a rehogar junto con el aceite y la mantequilla a fuego medio-bajo durante 20 minutos, nos ha de quedar casi transparente, no tostada. A media cocción, cuando lleve unos diez minutos más o menos, le añadimos el ajo troceado muy pequeño.
4.- A continuación le añadimos la harina a lo anterior y la rehogamos durante un par de minutos. Enseguida le añadimos la leche que tendremos reservada y previamente colada, y vamos removiendo, mientras controlamos bien el fuego; sobre todo que no se nos queme.
5.- Añadimos la nuez moscada, la pimienta y el perejil. Enseguida empezará a espesar. Lo mantenemos 10 minutos aproximadamente. Apartamos y le añadimos los huevos duros troceados. Mezclamos bien y lo ponemos un plato o superficie lo más plano posible para que se nos enfríe antes. Lo dejamos hasta que se enfríe por completo.
6.- Para el rebozado cogeremos una porción pequeña de masa, mas una gambita entera (la ponemos cruda ya que al ser pequeñas se hacen dentro de la croqueta al freírlas) y nuevamente añadimos otra pequeña porción de masa como si fuera un bocadillo, de manera que la gamba se quede en medio. Se le da forma de croqueta y las pasamos por pan rallado primero, luego por huevo batido y nuevamente por pan rallado; en ese orden, de ésa manera las croquetas cogen consistencia y están más crujientes.
7.- Por último se fríen en una sartén con aceite hasta que estén doradas.
LA FOTO:
También se pueden trocear las gambas o bien ponerle dos, si son pequeñas, como queráis, aunque a mi me gusta ponerla entera...
5 comentarios:
Buenísimas, ayer hablamos en una cena de la variedad de croquetas existentes, y una pareja amiga nuestra dijo que sus favoritas eran las de marisco (gambas)... mira tú por dónde vengo hoy y tienes publicada una parecida. Me has ahorrado pedirle su receta. No me pirran las croquetas pero reconozco que entre las congeladas y éstas.... pfff. Genial explicación. Un saludo.
Hola, Anna!
Tens un bloc interessantíssim: Receptes de les que m'agraden; fotografies precioses, i explicacions acuradíssimes. Trauré el nas sovint per aquí. L'enhorabona, de tot cor!
Carlos, pues mira que ahora me ha entrado curiosidad por saber como hace tu amiga las croquetas. Bueno, si las hiciera muy diferente a las mías ya me lo dirás; siempre es culturilla contrastar.
Es verdad que hay infinidad de ellas, casi todo se puede ‘encroquetar’, que gran invento!
Gracias Carlos.
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I tant, Enric!, passa't quan vulguis, això és casa teva!
Celebro que t'hagi agradat i estic encantada. Moltes gràcies, de tot cor!
con la gamba entera tienen que quedar muy bien, me ha gustado la receta
Eu, quedan muy bien, a mí es como más me gustan. Así no hay dudas de lo que están hechas ya que te encuentras la gamba de sopetón :)
Gracias, eu
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